Estamos en pleno verano y con él llegan las olas de calor. En esta época, hay que tener especial cuidado con los golpes de calor en nuestros animales. Son muy peligrosos, frecuentes y pueden causar la muerte en pocos minutos.

Nuestros animales son muy sensibles a las altas temperaturas, ya que para ellos es más complicado reducir la temperatura corporal por si mismos. Los perros, gatos o hurones no pueden regular su temperatura por el sudor, porque carecen de glándulas sudoríparas por el cuerpo.

Ellos pueden regular su temperatura por el jadeo, el sudor eliminado por las almohadillas de sus patas y el lamido del pelo (en gatos).

En el caso de los conejos, lo hacen a través de sus orejas.Cuando hace mucho calor, o en traslados en coche, los procedimientos de regulación de temperatura pueden ser poco eficaces y se puede producir el temido golpe de calor.

En este caso, la temperatura media corporal que oscila ente 38 º / 39º, sube por encima de los 42º y puede provocar daños temporales o permanentes, que pueden desembocar en la muerte del animal en 10 minutos.

¿CÓMO IDENTIFICAR SI NUESTRA MASCOTA ESTÁ SUFRIENDO UN GOLPE DE CALOR?

Síntomas iniciales:

– Temperatura interna mayor de 42 º.

– Jadeo exagerado.

– Respiración muy rápida.

– Aumento del ritmo cardiaco.

– Sed extrema.

– Vómitos frecuentes.

– Lengua rojo brillante y encías pálidas.

– Salivan mucho.

Cuando se agrava:

– Gran dificultad para respirar.

– Encías se vuelven de rojo brillante a azuladas o moradas.

– Presentan gran debilidad, fatiga y temblores.

– Pueden presentar pequeñas manchas rojas en la piel (petequias).

– Desorientación.

– Colapso, muerte por fallo multiorgánico.

¿QUÉ PUEDO HACER?

Por supuesto, hay que llevarlo urgentemente a una clínica veterinaria para que lo traten. A veces aunque hayamos podido controlar el golpe de calor, se producen daños que hay que detectar.

Mientras lo trasladas, o si no puedes trasladarlo:

– Hay que bajar la temperatura de forma paulatina. Para esto podemos humedecer, sin envolver ni tapar, el cuello y cabeza con paños húmedos. Pulverizar con agua, sumergirle en agua a una temperatura de unos 20º.

– Cuidado, la bajada de temperatura debe ser paulatina, por esto, no debe utilizarse agua helada. Tampoco debéis envolver con toallas mojadas.

– Podéis utilizar cubitos de hielo sobre ingles y axilas o encima del hocico.

– Humedecer la boca. Hay que evitar que beba en exceso.

– Situarlo en un sitio fresco, podéis ayudaros de un ventilador.

– Tened cuidado que la temperatura no baje demasiado. Para esto es útil ayudaros de un termómetro, puede ser digital (se pone por el culete).

CÓMO PREVENIR EL GOLPE DE CALOR

– Tienen que tener siempre a su disposición agua fresca y limpia. Cuando bajes al parque puedes llevar un bebedero portátil y ponerle agua fresca.

– Que tengan a su disposición un lugar ventilado. En el caso de animales de jaula, situarlo en el sitio más fresco posible, se les puede colocar botellas heladas cerca de la jaula y vaporizar con agua de vez en cuando.

– En el caso de los conejos, puedes humedecer con agua fresca sus orejas y darles verdura lavada no secada.

– Evitar los paseos en las horas de más calor. Elegir las primeras horas del día y las de la noche.

– Evitar que hagan ejercicio en las horas de más calor.

– Darles la comida a primera hora de la mañana o por la noche.

– Nunca dejarles en el coche parado, aunque solo sea por unos minutos es muy peligroso.

– Cuando viajamos con ellos, si no disponemos de aire acondicionado, mojarles un poco de vez en cuando, darles agua fresca a menudo. Podemos suministrarles toallas húmedas para que se puedan tumbar encima.

– Mucho cuidado con los transportes en las bodegas de los barcos en verano, hace mucho calor y no llevan refrigeración.

– Cuidado con los animales de riesgo, que son más delicados al calor. Como los cachorros, ancianos, cardiópatas o animales con sobrepeso. Sin olvidarnos de algunas razas de perro que ya por su pelaje denso (husky, samoyedo, etc.) o por ser muy chatos, es decir braquicéfalos (boxer, bulldog, shitzu etc), entran también en este grupo.

– Utilizar todos esos trucos que hemos comentado: poner toallas húmedas a su disposición, cubitos de hielo en el agua, pulverizarlos con agua, para que el calor sea más llevadero.

Como siempre os digo, si tenéis alguna duda al respecto. Nos podéis llamar o acudir a alguno de nuestros centros veterinarios.